viernes, 4 de enero de 2013

Your meme was wrong


¿Ser fiel ya solo es una moda? Esto me lo he preguntado muy a menudo. Ser fiel, no solo a otra persona sino serte fiel a ti mismo, a tus ideales y esas cosas.

Esto quizá sea un poco pesado.

Hay que respetar, lo sé, no tengo ningún inconveniente con que una persona quiera salir con alguien que no sea su pareja, cada quien su base ideológica.

Hace unos años, luego de que un amigo se sintiera bastante mal por engañar a su entonces novia con una ex-novia , alguien me perturbo por la forma en que llego a consolarlo:  “No importa que lo hayas hecho, después de todo somos jóvenes y es momento de disfrutar la vida”.

No fue la idea, fue la imposición de la idea. Sí, nosotros éramos jóvenes (yo 17 y mi amigo 18), pero ¿porque diantres esa es una razón que justifique nuestras acciones? Mi amigo realmente se sentía mal, él creía bastante en la idea de fidelidad y no hacía daño a nadie por ser fiel a esa idea… bueno, más que a él mismo en ese momento.

Algunos argumentos que he oído contra la fidelidad es que se trata de una idea obsoleta, ya saben, sí podemos darle felicidad a muchas personas ¿por qué negársela? Y cosas así. Vale, esa es una forma de pensar, pero tampoco es nueva, mucho menos algo innovador o mejor.

Mucho tiene que ver la idea que tenemos por matrimonio y la estrecha relación que le damos con los funerales. Pero en lo particular me parece un error creer que el matrimonio o la fidelidad son cárceles. Después de todo, el único y verdaderamente pre-requisito que tiene un matrimonio es que la pareja se sienta con suficiente disposición a serle fiel el uno al otro.

Si te casaste con alguien y no te sientes a gusto, culpable a ti por no pensar bien las cosas, no a la idea de fidelidad.

Nótese que uso de manera indistinta los términos Matrimonio y Fidelidad. Sé que no son necesariamente lo mismo, pero creo que solo varían en su temporalidad: el primero es para siempre, el segundo es solo indeterminado.

Pero “¿y los ideales a’pa? A chinga mijo ¿cómo que los ideales? Pues sí pa, nuestras ideas, nuestras utopías ¿también les soy fiel o les pongo los cuernos? No sea pendejo mijo, o se piensa así o se piensa ‘hazi’” Me sorprende que castiguemos tanto no serle fiel a los ideales y no serlo con las personas (hablo en un sentido más amplio que el sentimental). Por poner un ejemplo, la guerra civil de muchos países, si se quiere ver de esta forma, enfrento a hermanos contra hermanos. A veces hermanos de sangre y otras veces solo en sentido figurado, pero hermanos. Hermanos que alguna vez se juraron lealtad.

Serle fiel a una mujer, a algunos hombres les ha costado la vida. Serle fiel a una idea, le ha costado la vida a pueblos enteros.

¿Son realmente tan importantes las ideas?

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